La espirulina es una alga verde azulada que es rica en vitaminas, minerales, antioxidantes y proteínas. La espirulina también contiene nutrientes vitales, como el betacaroteno, la vitamina E y el ácido gamma linolénico, un ácido graso esencial que respalda la función articular y cerebral, según el Centro Médico de la Universidad de Maryland. La espirulina está disponible en forma de píldora, escamas o en polvo. El polvo es más fácil de usar cuando mezclas espirulina en batidos. Debido a que son algas, la espirulina puede estar contaminada. Elija una marca acreditada de espirulina en polvo. La espirulina combina bien con batidos a base de frutas y jugos, pero es difícil de mezclar con batidos a base de lácteos.
Agregue 1 a 2 cucharadas de espirulina a una taza de jugo de fruta fresca. Mezcle la espirulina en el jugo revolviendo vigorosamente.
Colocar una o dos tazas de hielo en una licuadora. Agregue una o dos tazas de fruta recién cortada, como moras, fresas o arándanos. Agregue un plátano para espesar el batido.
Mix la mezcla de hielo, fruta y plátano a temperatura alta durante 20 a 30 segundos o hasta que esté suave. Prueba la consistencia de la mezcla: debe ser espesa. Agregue más hielo y plátano para espesar.
Verter el jugo de fruta y la mezcla de espirulina en la licuadora. Mezcle la mezcla de hielo, fruta y plátano con la mezcla de jugo y espirulina a baja velocidad durante 10 a 20 segundos, o hasta que la mezcla esté completamente mezclada.
Verter en un vaso y sirva de inmediato.
Consulte con su médico antes de usar espirulina, ya que puede causar interacciones con algunos medicamentos.