Aunque la tasa promedio de pérdida de peso es de una a dos libras por semana, puede perder hasta siete libras en una sola semana adoptando una dieta estratégica. Es una especie de remedio casero, ya que solo requiere el uso de alimentos que puede encontrar fácilmente en su casa y no requiere recetas complicadas o conocimientos de cocina. Solo recuerde que cualquier dieta de pérdida de peso rápida deberá combinarse con una rutina de ejercicios regular para ver los resultados.
Tire cualquier bebida gaseosa que tenga en casa y comience a pedir agua cuando esté en restaurantes. Eliminar los refrescos de su dieta puede eliminar hasta 500 calorías de su dieta diaria, lo que facilita perder peso.
Beber agua antes de las comidas y durante todo el día. Beber un vaso de agua de ocho onzas antes de una comida llenará su barriga y evitará que coma demasiadas calorías. Continuar bebiendo hasta ocho vasos de agua durante el día lo ayudará a prevenir la deshidratación, la hinchazón y el comer en exceso.
Agregar una porción de vegetales para todas sus comidas. Las verduras tienen un alto contenido de agua y fibra, lo que ayuda a llenarte sin agregar calorías a tu dieta. Además, le impedirán comer demasiado de sus otros alimentos, como los productos cárnicos, que pueden ser ricos en grasas.
Eat bayas o naranjas enteras o manzanas como su opción de merienda solitaria. Cualquier fruta servirá, ya que están llenas de agua y fibra, se están llenando y pueden satisfacer tus antojos.
Eat hasta seis comidas pequeñas al día en lugar de las tres grandes típicas. Comer más comidas durante el día te mantendrá lleno. Las comidas más pequeñas involucrarán constantemente su metabolismo, ayudándole a quemar más calorías y reduciendo la probabilidad de comer en exceso.