Como parte del sistema del tracto urinario, los riñones son responsables de eliminar el exceso de líquidos y desechos del cuerpo. Como todos los órganos, sus riñones son susceptibles al cáncer. Según la National Kidney Foundation, hay dos tipos principales de cáncer de riñón: cáncer de células de transición y renal. Ajustar su dieta para excluir los alimentos renales malos puede jugar un papel importante en el tratamiento de su cáncer de riñón.
Según los "Johns Guía del paciente de Hopkins para el cáncer de riñón "por la Dra. Janet R. Walczak, los pacientes con cáncer de riñón deben evitar los alimentos que contienen altas cantidades del compuesto de oxalato. Este producto químico puede alojarse en los riñones, formar cálculos y causar complicaciones que pueden afectar el tratamiento del cáncer de riñón. Estos químicos se encuentran comúnmente en vegetales de hojas verdes oscuras, remolacha, ruibarbo, espinacas, té, salvado de trigo, tofu y nueces.
Aunque la proteína es beneficiosa para mantener la fuerza muscular y construir células, en pacientes con cáncer de riñón Puede empeorar su condición. Cuando consume alimentos ricos en proteínas, el ácido úrico compuesto químico puede acumularse en su cuerpo como una toxina y causar afecciones que pueden complicar el cáncer de riñón. Esto puede causar complicaciones como trastornos cardíacos, dolor en las articulaciones y debilidad muscular. Una actualización de nutrición renal de 2011 en "Renal and Urology News", las proteínas animales son más dañinas que las proteínas vegetales si padece una enfermedad renal. Las proteínas animales se pueden encontrar en pollo, cerdo, ternera, leche, cremas, queso, huevos y otras formas de carne. La proteína vegetal incluye frijoles, nueces, semillas y granos integrales.
El exceso de potasio en su cuerpo puede afectar su condición de cáncer de riñón. El potasio regula las funciones musculares y cardíacas. Como resultado, un exceso de potasio puede causar debilidad muscular y problemas cardiovasculares que pueden complicar el cáncer de riñón, señala el Dr. Eric P. Cohen en "El cáncer y el riñón". Los alimentos ricos en potasio incluyen aguacate, chocolate, granola, dátiles, higos, salvado, calabaza, albaricoques, mantequilla de maní, melaza, brócoli, melaza, leche y plátanos, según lo enumerado por la National Kidney Foundation.
Si tiene cáncer de riñón o una enfermedad asociada, el consumo de alimentos con fósforo puede complicar su condición. Cuando comes alimentos ricos en fósforo, tu cuerpo no puede excretar adecuadamente el químico, informa la National Kidney Foundation. Esto puede provocar debilidad, dolor en las articulaciones y estrés innecesario en los riñones. Los alimentos ricos en fósforo incluyen hígado, frijoles, chocolates, yogurt, leche y queso.