Muchas personas que hacen dieta saben que el consumo de vino tinto se ha relacionado con un menor riesgo cardiovascular y pérdida de peso. Alguna evidencia sugiere que este beneficio se extiende también al vino blanco. Beber una cantidad ligera o moderada de vino blanco puede ayudarlo a perder kilos de más. Sin embargo, otros efectos del consumo de vino pueden negar estos beneficios de pérdida de peso. Hable con un médico antes de comenzar a beber vino por razones de salud, ya que el consumo de alcohol puede no ser seguro para usted.
El vino contiene antioxidantes llamados epicatequina, quercitina y resveratrol. Estos compuestos reducen los niveles de colesterol y los radicales libres que causan enfermedades. Los antioxidantes beneficiosos en el vino también pueden promover la pérdida de peso y una circunferencia de cintura más pequeña en las mujeres. Una o dos bebidas de vino blanco por día son una cantidad adecuada para conferir este beneficio para la salud.
Aunque los antioxidantes en el vino blanco están asociados con la pérdida de peso, el vino contiene un número relativamente alto de calorías Un vaso de vino blanco de 5 onzas contiene 121 calorías. Beber dos copas de vino por día agrega aproximadamente 1,700 calorías a su dieta cada semana. Sin restringir la ingesta de alimentos o hacer ejercicio con más frecuencia, las calorías adicionales en el vino le harán aumentar dos libras por mes. El Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre informa que 3.500 calorías equivalen a una libra, por lo que solo dos semanas de 2 copas de vino por día comenzarán a ponerle peso.
Beber vino blanco disminuye sus inhibiciones, lo que puede hacer que coma más de lo que normalmente comería . Controle cuidadosamente la ingesta de alimentos en cada comida para asegurarse de no comer en exceso. Si tiene vino blanco con una comida, coma lentamente para darle a su cuerpo el tiempo suficiente para reconocer cuándo está lleno.
Si bien algunas pruebas sugieren que el vino blanco puede ayudarlo a perder peso, los factores ambientales también influyen papel. Las personas que beben cantidades de vino ligeras a moderadas tienden a tener un nivel socioeconómico más alto. Un mejor acceso a la atención médica, una dieta más saludable o una buena salud en general pueden impulsar la pérdida de peso asociada con el consumo de vino.
El USDA define el consumo moderado de alcohol como 1 bebida diaria para mujeres y no más de 2 para los hombres. Beber más de eso puede aumentar su riesgo de enfermedad cardíaca y cáncer de seno, según el Instituto Nacional sobre Abuso de Alcohol y Alcoholismo. Una bebida al día aumenta el riesgo de cáncer de seno de una mujer en un 10 por ciento, y otro 10 por ciento por cada bebida después de eso.