Intolerancia a los Lácteos y Gastritis

By Mariana Carmona | marzo 19, 2019

Si experimenta irritación o molestias gastrointestinales después de comer productos lácteos, puede ser intolerante a los productos lácteos o la lactosa. La intolerancia a los productos lácteos significa que su sistema digestivo tiene problemas para procesar productos lácteos como la leche, los huevos y el queso. La gastritis también puede ocurrir si tiene intolerancia a los productos lácteos. La gastritis es una afección en la que el revestimiento del estómago se inflama. Buscar tratamiento y evitar los alimentos que desencadenan ambas afecciones puede ayudarlo a tener un sistema digestivo saludable.

Rallar parmesano en espagueti
      Un chef está rallando queso parmesano en un plato de espagueti.     
Crédito de imagen: moodboard / moodboard / Getty Images       

Intolerancia a los lácteos

La intolerancia a los lácteos o lactosa es una condición común y aproximadamente 30 millones de adultos son intolerantes a la lactosa a los 20 años, señala PubMed Health. Una intolerancia a los lácteos ocurre cuando el intestino delgado no produce suficiente lactasa, una enzima digestiva que ayuda a la absorción de alimentos. Los síntomas pueden incluir gases, náuseas, diarrea y calambres abdominales y distensión abdominal. Entre las muchas causas de intolerancia a los lácteos se encuentran las infecciones intestinales, las enfermedades intestinales y otras afecciones del tracto gastrointestinal, incluida la gastritis.

Gastritis

Puede encontrar que su gastritis se desencadena cuando consume ciertos productos lácteos, especialmente leche de vaca , explica Drugs.com. Es más probable que desarrolle un caso agudo de gastritis si tiene una intolerancia láctea grave. La gastritis ocurre cuando la capa protectora del estómago está comprometida o dañada. La gastritis puede desencadenarse por muchas cosas además de la intolerancia a los productos lácteos, como infecciones bacterianas, estrés y enfermedad por reflujo biliar, señala MayoClinic.com. Los síntomas incluyen indigestión, vómitos y sensación de saciedad en el abdomen después de comer.

Complicaciones

Si bien la intolerancia a los lácteos y la gastritis a menudo son afecciones que pueden controlarse o evitarse, algunas complicaciones puede desarrollarse La deshidratación puede ocurrir, especialmente con gastritis, esto se debe principalmente al vómito y la pérdida de electrolitos y líquidos. Si comienza a vomitar después de cada comida o nota sangre en el vómito o en las heces, busque atención médica de inmediato. La intolerancia a los productos lácteos puede provocar pérdida de peso y deficiencia de calcio. Puede experimentar pérdida de peso si consume menos calorías de las recomendadas por día debido a la sensación de náuseas o hinchazón por el consumo de lácteos. La deficiencia de calcio puede ocurrir si evita los productos lácteos de manera constante con el tiempo.

Solución

Puede controlar la intolerancia a los lácteos implementando sustituciones de soya o no lácteos en lugar de lácteos enteros productos Tome un suplemento de calcio para aliviar su riesgo de pérdida de masa ósea, especialmente si tiene riesgo de osteoporosis. Debido a que los síntomas de gastritis son similares a la intolerancia a los lácteos, pregúntele a su médico acerca de un diagnóstico preciso. Reducir los niveles de estrés, eliminar los alimentos picantes y tomar antiácidos puede ayudar a reducir la aparición de gastritis, explica MedlinePlus.