Después de su reemplazo de cadera, puede estar ansioso por volver a sus actividades diarias normales. El uso de un bastón le permitirá caminar de manera más segura y reducirá el riesgo de caídas. Consulte a un fisioterapeuta para garantizar la técnica adecuada antes de intentar caminar con un bastón después de la cirugía.
El propósito de un bastón es para proporcionar apoyo a los músculos y tejidos blandos que se curan alrededor de la cadera artificial, aliviar las molestias y mejorar la estabilidad. Después de la cirugía de reemplazo de cadera, la progresión de un andador a un bastón lleva varias semanas. Por lo general, avanzará a un bastón cuando pueda poner todo el peso en la pierna operada y pararse sin el apoyo de un andador. A menos que existan problemas de equilibrio debido a una afección médica subyacente, puede esperar caminar con una marcha normal sin bastón después de la cirugía de reemplazo de cadera.
La altura de un bastón es importante para garantizar que el soporte de la cadera artificial sea óptimo y que se mantiene la alineación natural del cuerpo. Un bastón demasiado alto evitará que empujes hacia abajo con la suficiente eficacia como para sostener la nueva cadera. Un bastón demasiado bajo saca el cuerpo del equilibrio. En cualquier caso, el uso de un bastón que no se ha medido correctamente da como resultado una marcha anormal y eventualmente provocará una tensión innecesaria en los músculos y las articulaciones.
La mayoría de las personas usarán un bastón recto después de la cirugía de reemplazo de cadera. Si se trata de un bastón de metal ajustable o de madera, suele ser una preferencia personal. Una ventaja del bastón ajustable es que puede modificar la altura en el futuro si es necesario o eventualmente pasarla a otra persona. Una variedad de mangos también están disponibles. Su fisioterapeuta puede recomendar el mejor tipo para usted. El mango curvo estándar, por ejemplo, puede ser adecuado para personas con muñecas fuertes y que solo usarán un bastón temporalmente. Pero, un bastón con un mango más ergonómico puede ser una mejor alternativa para las personas que tienen dolor o debilidad en las manos o las muñecas, y que pueden requerir un bastón a largo plazo.
Su fisioterapeuta se asegurará de que pase de un andador a un bastón de manera segura. Para proporcionar un soporte adecuado a la cadera artificial, debe caminar con el bastón en la mano opuesta. Para algunas personas, esto puede parecer contradictorio. Sin embargo, en una marcha normal, su brazo y pierna opuestos se balancean hacia adelante juntos. Si necesita mayor estabilidad, su terapeuta puede recomendar el uso de dos bastones y le demostrará el método para usarlos.
Las escaleras pueden ser desalentadoras en el primer intento, pero su fisioterapeuta le dará instrucciones sobre cómo para manejarlos de manera segura. La regla es que un bastón siempre permanece con la pierna operada, ya sea que esté subiendo o bajando una escalera. La pierna fuerte sube primero cuando sube escaleras, y la pierna operada baja primero cuando desciende. Manténgase enfocado en la tarea al acercarse a las escaleras, especialmente si no hay pasamanos. En casa, asegúrese de que la iluminación en las escaleras sea amplia en interiores y exteriores. Resalte el borde del escalón con cinta antideslizante que se puede comprar en un proveedor de equipos médicos o ferretería.