Beneficios de la leche de maní

La leche de maní es una opción para probar si sigue una dieta libre de caseína porque, al contrario de su nombre, no contiene leche real. Esta bebida se prepara mezclando cacahuetes con agua y agregando edulcorantes o condimentos como la canela. La leche de maní proporciona algunos beneficios nutricionales que no obtendrá de la leche de vaca. Es una buena fuente de vitamina E, tiene al menos el doble de magnesio y vitamina B-6 y está repleto de grasas insaturadas saludables para el corazón.

A pesar de Por sus beneficios nutricionales, la leche de maní se debe consumir con moderación porque 1 taza tiene aproximadamente 214 calorías, con 162 del total de calorías provenientes de las grasas. En el lado positivo, la mayoría de las grasas en la leche de maní consisten en grasas insaturadas saludables que reducen los niveles de colesterol en la sangre y aumentan el colesterol bueno. La leche de maní retiene la fibra soluble natural de la nuez, que también ayuda a reducir el colesterol. Puede esperar obtener 3 gramos de fibra total, o el 12 por ciento del valor diario, según una dieta de 2,000 calorías por día.

El magnesio facilita cientos de procesos metabólicos en su cuerpo, donde ayuda a producir energía y asegura que sus músculos, nervios y corazón sigan trabajando. También ayuda a bajar la presión arterial y es esencial para tener huesos fuertes. Los cacahuetes son buenas fuentes de este importante mineral. Dependiendo de la cantidad de maní que use para hacer leche de maní, una porción de 1 taza debe contener alrededor de 65 miligramos de magnesio. Basado en el consumo de 2,000 calorías diarias, esta cantidad proporciona el 16 por ciento del valor diario.

Cuando digiere las grasas, están metidas dentro de una cubierta exterior hecha de grasas y proteínas. Estas lipoproteínas transportan el colesterol y otras grasas a través del torrente sanguíneo. La vitamina E es un antioxidante que ayuda a proteger las grasas de las moléculas reactivas comúnmente conocidas como radicales libres. Al neutralizar los radicales libres antes de que causen daños, la vitamina E ayuda a mantener la integridad estructural de las lipoproteínas. Como resultado, no liberan colesterol que puede adherirse a los vasos sanguíneos y provocar enfermedades cardiovasculares. Una taza de leche de maní contiene aproximadamente 2 miligramos de vitamina E, o el 13 por ciento de la cantidad diaria recomendada de 15 miligramos.

Su cuerpo depende de la vitamina B-6 para activar más de 100 enzimas que desencadenan reacciones metabólicas. Algunas de estas enzimas dependientes de B-6 ayudan a producir hemoglobina para los glóbulos rojos y a sintetizar aminoácidos y neurotramsitters. La vitamina B-6 también ayuda a convertir un aminoácido, la homocisteína, en otras sustancias beneficiosas. En este papel, reduce los niveles de homocisteína en la sangre, lo cual es beneficioso porque los altos niveles de homocisteína aumentan el riesgo de enfermedad cardiovascular. La leche de maní proporciona alrededor del 10 por ciento del valor diario de vitamina B-6.