El ejercicio isocinético es mucho más específico que la mayoría de los otros tipos de ejercicio. Permite un control específico de la resistencia y, por lo tanto, tiene mucho menos potencial para causar una lesión. El ejercicio isocinético se usa con mayor frecuencia en fisioterapia, pero el público en general lo está utilizando cada vez más. La mayoría de los ejercicios isocinéticos utilizan solo peso corporal o pesos muy ligeros.
Ejercicios isocinéticos son ejercicios en los que se aplica resistencia variable a una extremidad en constante movimiento. Mientras realiza ejercicios isocinéticos, contrae su músculo mientras mueve rápidamente su extremidad. Los equipos como las bicicletas estacionarias, para las cuales puede establecer una cantidad de revoluciones por minuto, y las bandas de resistencia pueden permitir la realización de ejercicios isocinéticos, aunque en muchos casos es necesario un equipo especializado. Un dinamómetro es una pieza de equipo especializado que mide sus movimientos y la tensión en sus músculos. Esta retroalimentación le permite modificar sus patrones de ejercicio para alcanzar sus objetivos de condición física.
Uno de los principales beneficios de los ejercicios isocinéticos es la menor probabilidad de lesiones. Dado que la resistencia y la velocidad del ejercicio están controladas, es muy poco probable que se esfuercen los músculos. Por ejemplo, una bicicleta estática puede tener precauciones de seguridad que te limitan a pedalear demasiado rápido. Otro beneficio de los ejercicios isocinéticos es el monitoreo cercano de la activación muscular y la tensión, lo que permite un desarrollo muscular más controlado y una mayor flexibilidad muscular.
Un ejercicio isocinético simple y seguro es caminar en una cinta de correr. Caminar a paso rápido varias millas por hora será suficiente. Si no eres un principiante, puedes aferrarte a las pesas y aumentar tu velocidad a un trote lento. También puedes realizar una sentadilla básica. Párate con los pies separados al ancho de los hombros y las manos detrás de la cabeza. Póngase en cuclillas lentamente durante cinco segundos. Mantenga durante dos segundos en la parte inferior, luego tome cinco segundos para volver a ponerse de pie. Haz de 10 a 15 repeticiones.
El ejercicio isocinético se usa con mayor frecuencia en fisioterapia. Pero su capacidad para controlar el estrés en los músculos y optimizar el progreso significa que esta forma de ejercicio muestra un gran potencial para llegar al público en general, específicamente para fines de tratamiento y prevención de lesiones. Puede adaptarse para niveles más altos de entrenamiento agregando más resistencia.