Imagina tu articulación de la cadera como una copa que cabe sobre una bola en un palo. La pelota puede girar alrededor de la copa para facilitar el movimiento; en el caso de la articulación de la cadera, movimientos como caminar y patear. Si experimenta displasia de cadera, la cavidad de la cadera, la copa, no cubre completamente el accesorio en forma de bola de la pierna. La displasia de cadera ejerce una presión adicional sobre la articulación de la cadera y puede provocar síntomas de dolor y artritis. Para minimizar estos síntomas, puede realizar ejercicios para restaurar el rango de movimiento.
Los ejercicios de abducción de cadera implican levantar la pierna lejos del cuerpo. Esto fortalece los músculos que actúan sobre la cadera para proporcionar mayor estabilidad y fuerza. Envuelva una banda de resistencia alrededor de sus tobillos y apunte su pie derecho hacia un lado. Lentamente levante la pierna a su lado lo más alto que pueda sin dolor; No empuje hasta el punto de tensión muscular. Mantenga durante tres a cinco segundos, luego baje la pierna. Repita 10 veces, luego baje para descansar durante 30 segundos. Cambie a su pierna opuesta y repita el ejercicio.
Acuéstese boca arriba con las piernas extendidas. Suavemente jale su rodilla hacia su torso, envolviendo sus brazos alrededor de su rodilla para apoyo. Intenta mantener la pierna izquierda lo más recta posible. Mantenga este estiramiento durante 15 a 30 segundos, luego suelte la rodilla. Repita tirando de la pierna izquierda hacia el pecho. Complete el ejercicio repitiendo tres veces en cada pierna.
Este ejercicio consiste en rotar la pierna y levantarla para trabajar los músculos internos de la cadera. Gire los dedos de los pies hacia afuera, de modo que sus pies estén uno frente al otro. Lentamente levante la pierna izquierda hacia arriba, doblando la rodilla. No levante la pierna más alta que la altura de la cadera. Sostenga en el punto más alto que pueda estirar cómodamente durante tres a cinco segundos, luego baje la pierna al suelo. Repita de ocho a 10 veces, luego realice en la pierna opuesta.
Aunque los ejercicios cardiovasculares como nadar y caminar pueden ayudarlo a mantener su peso y desafiar su corazón y pulmones, otros ejercicios pueden ser demasiado difíciles para las personas con displasia de cadera. Estos incluyen correr y deportes de impacto como el fútbol. Otros ejercicios, como remar, jugar tenis o andar en bicicleta, también deben realizarse con moderación porque ejercen cierto grado de tensión en las articulaciones de la cadera. Abstenerse de utilizar estos ejercicios como su principal medio de ejercicio.